miércoles, enero 21, 2009

ORACIÓN " JESÚS SUMO SACERDOTE "




ORACIÓN: "JESÚS SUMO SACERDOTE".

POR PROF.DR. MERVY ENRIQUE GONZÁLEZ FUENMAYOR.

MARACAIBO. ESTADO ZULIA VENEZUELA AMÉRICA DEL SUR.

TOMADA DE SU VERSIÓN ORIGINAL LUNES 15 SEPTIEMBRE DE 1997.

TRASLADADA A LA RED MARTES 20 DE ENERO DE 2009


MARTES 20 DE ENERO DE 2009





(Fragmentos elegidos de la sección: "MERVY GONZÁLEZ ESTÁ CONVERSANDO CON…" que formó parte de un programa radial en el que participó como conductor por espacio de cuatro años aproximadamente: 1996, 1997, 1998, 1999, que se trasmitía en una estación radio eléctrica ubicada en la ciudad de Maracaibo-.Estado Zulia.- República Bolivariana de Venezuela. América del Sur).



O R A C I Ó N

Después de la caída del paraíso nadie podía rogar dignamente por el hombre .Entre Dios y nosotros se estableció el abismo del pecado que ninguna criatura racional podía llenar .Se necesitaba entonces, un sumo sacerdote que fuera nuestro hermano por la carne y por la sangre, pero que estuviera infinitamente elevado sobre nosotros, por la santidad y por el poder de sus súplicas. Dios proveyó a esta necesidad del género humano perdido por la culpa, dándonos a su hijo divino, revestido de nuestra naturaleza, para que fuese nuestro sumo sacerdote y nuestro mediador. Jesucristo es el sumo sacerdote que necesitamos. santo, inocente, inmaculado, separado de los pecadores y más sublime que los cielos. Después de haber llenado plenamente en la cruz el gran oficio de sacerdote, lo continúa en el santísimo sacramento, en este misterio lo mismo que en la cruz, el es al mismo tiempo, el sumo sacerdote y la víctima. Acógete lleno de confianza a las oraciones y al sacrificio de Jesucristo, nuestro inmortal sumo sacerdote. El es nuestra justificación, santificación y redención, por él vamos a nuestro padre que está en los cielos y no hay otro camino para nuestras súplicas, sino el mismo. Desgraciado de ti ,si no conoces y amas estos misterio de vida y salvación. Cuánto consuelo para mi alma, Jesús mío, hay en el pensamiento de que tú eres nuestro sumo sacerdote. A tus oraciones unimos nuestras pobres súplicas y a tus sacrificios, nuestros ligeros sufrimientos. Enséñame a ser de mi corazón un altar, sobre el cual te ofrezca las víctimas espirituales










COMENTARIO

(APLICACIÓN A NUESTRA VIDA)


Si , en Jesucristo reconocemos víctima y sumo sacerdote. Es nuestro hermano en la sangre, en la carne. Pero elevado encima de nosotros por su pureza y santidad. El que no tuvo culpa ni pecado, llevó nuestras culpas y nuestros pecados para reconciliarnos con el padre. Esas razones entre otras nos obligan a nosotros sus hijos ,a vivir en paz, a buscar la paz, y a trabajar siempre bajo la sombra de la paz que irradia de la palabra del señor .Por ello la paz que debemos buscar no es la paz mundana si no la paz que viene de Dios. Paz: satisfacción que tiene uno, de sus actos allá en su interior, cuando la conciencia va diciéndole con suavidad de arrullo : has hecho bien. O ¿ Que tiene que ver la satisfacción brutal de los sentidos avanzados al placer ,con esa interior en la que Dios vuelca la placidez de su sonrisa y la caricia de su gracia?. Es obvio que la primera expresión se vincula con la paz mundana que es la paz de los sentidos y nunca con esa paz interior volcada por Dios en nosotros y expresada en esa placidez de nuestra sonrisa. Para la impiedad y el desorden no existe la felicidad incomparable de esa paz .aquel contentamiento que irradian los rostros de los que tú crees alegres, cuantas tristezas y remordimientos ocultan. La más de las veces son rosas que cubren la boca de una abismo, para acallar esos gritos sin palabras de la conciencia, necesitan buscar el bullicio y aturdidos engolfarse en los brazos del placer. Nunca andan solos, temen a la soledad, verse a solas con la conciencia es propio de los que están tranquilos, de los que se rigen por la razón, de los que no temen encontrarse con Dios. La conciencia es un reflejo del rostro divino .Por eso rehúyen encontrarse con ella en la soledad. Ámala tu.. Sólo debes temerla en el dia aquel en que tengas miedo de ti mismo. Anda, vas hacia el triunfo, canta, escala las cumbres por las asperezas del sendero. Desgrana sobre las sendas, las notas de un canto de gloria. Si te hieren las espinas y los guijarros del camino, no prorrumpas en quejas, entona por el contrario el salmo de de la vida de las en las cumbres, donde el cielo es más puro, donde las auroras brillan antes y los crepúsculos arrojan sus últimos rayos de luz como un tributo a las alturas. Si es cierto que la senda de la elevación tiene asperezas, no te olvides hermano y hermana, que tiene también innumerables y divinas satisfacciones. No seas tú de aquellos que solamente tienen quejas, porque las rosas están llenas de espinas, en lugar de entonar un himno a las espinas porque custodian las maravillas de las rosas. Tú asciende por el contrario, lleno de armonía, como las fuentes que cantan a tu paso desflorando tus alegrías íntimas, como los huertos en flor que te rodean. Animo, gozo, alegría...








ETIQUETAS: HERMANO EN CARNE, HERMANO EN SANGRE, VICTIMA Y SACERDOTE




N O T A D E L A U T O R
AMIGOS Y AMIGAS, esta oración con comentario incluido, forma parte de una larga lista de ellas y que movido por el Espíritu Santo, ofrendaba al Señor de Lunes a Viernes a las siete de la mañana, en un programa radial de opinión, en el que participaba en compañía de una periodista, en el cual mi persona le dedicaba tres minutos o más (dependiendo de la Producción y/o de Máster) a orar y analizar esa oración aplicándola a la cotidianidad de nuestra vida, de nuestros actos, de nuestras, alegrías, tristezas, éxitos, fracasos, tragedias, tribulaciones, bonanza, prosperidad, bienestar, etc. Todo con la intención de establecer como verdad aquella según la cual Dios siempre está con nosotros, que todo lo que nos ocurre es para bien, que existe un plan o proyecto de salvación para cada uno de nosotros diseñado por el mismísimo Dios, cuyo cumplimiento, decisión y elección depende de ti. Así que -parafraseando la escritura bíblica- "DIOS NOS HIZO SIN NUESTRO CONSENTIMIENTO, PERO NO NOS SALVARÁ SIN QUE LE OFREZCAMOS ESE CONSENTIMIENTO". ES DECIR, NUESTRO PERMISO Y AUTORIZACIÓN. El Señor es un caballero, y está siempre a las puertas de nuestro corazón, para que le abramos y pueda entrar para guiar nuestra vida y ofrecernos su santidad, gozo, alegría, discernimiento, sabiduría, y sus infinitos dones espirituales y materiales. Esa estación radioeléctrica está situada -todavía está al aire- en la ciudad de Maracaibo, Estado Zulia, República Bolivariana de Venezuela.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, soy Misionera de Jesus Sacerdote y me gusto mucho la oración que escribe, en hora buena felicidades.