miércoles, junio 03, 2009

ORACIÓN “JESÚS ES SEÑOR”




ORACIÓN “JESÚS ES SEÑOR”

POR PROF. DR. MERVY ENRIQUE GONZÁLEZ FUENMAYOR
MARACAIBO.ESTADO ZULIA.REPÚBLICA DE VENEZUELA.AMÉRICA DEL SUR
TOMADA DE SU VERSIÓN ORIGINAL MARTES 28 ABRIL DE 1998.
TRALADADA A LA RED EN MIERCOLES 03 DE JUNIO DE 2009.


(Fragmentos elegidos de la sección: "MERVY GONZÁLEZ ESTÁ CONVERSANDO CON…” que formó parte de un programa radial en el que participó como conductor por espacio de cuatro años aproximadamente: 1996, 1997, 1998, 1999, que se trasmitía en una estación radio eléctrica ubicada en la ciudad de Maracaibo-.Estado Zulia.- República Bolivariana de Venezuela. América del Sur).
Autoría del Prof. Dr. Mervy Enrique González publicada: MIERCOLES 03 DE JUNIO DE 2009


O R A C I Ó N

Señor te alabamos y te bendecimos, te damos gracias en esta mañana hermosa señor, y al estar en tu presencia nos llenamos de gozo señor y también recordamos en este momento la segunda carta de Pablo a los Filipenses en su capítulo 6, verso 11 y siguientes: Cristo Jesús siendo de condición divina no hizo alarde de ser igual a Dios, sino que se vació a si mismo tomando condición de siervo. Haciéndose semejante a los hombres. Tomando forma de hombre, y se humilló a si mismo obedeciendo hasta la muerte, en una muerte de cruz. Por lo cual Dios lo exaltó y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que al nombre de Jesús , toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos ,y toda lengua confiese, que Cristo Jesús es señor para gloria de Dios padre. Amén y amén...
COMENTARIO

(APLICACIÓN A NUESTRA VIDA)



Cuando escudriñamos en las santas escrituras, buscando la voluntad del señor en su palabra, el señor nos habla por medio de la misma. Debemos estar atentos entonces a determinar de manera clara que es lo que Dios quiere que pongamos en práctica para seguir construyendo el reino de los cielos aquí en la tierra. Cuando conversamos con Dios, cuando mantenemos una plática amorosa con el señor, realmente estamos dialogando en un plano de misericordia, de discernimiento, de amor y de piedad con el buen Dios. Su amor nos invade en mente cuerpo y espíritu. Nunca debe perderse la oportunidad de conversar con Dios. Lástima que en nuestra vida cotidiana le dediquemos tan poco tiempo a esta gran actividad y a esta gran relación. No sabemos lo que nos perdemos cuando dejamos de conversar con Dios, bien en una plática espontánea o en el sacramento de la reconciliación a través de la confesión, penitencia y absolución. Debemos estar plenamente conscientes que Jesús es hijo de Dios, es señor, es el príncipe de la paz, rey de reyes y señor de señores. Él es el camino, la verdad y la vida, nadie va al padre sino es por el. Por lo tanto reconocer su señorío es también reconocer la santísima Trinidad, tres personas y un solo Dios. Jesús nunca alardeó de su condición de hijo de Dios, de su condición divina, de su característica de unigénito del padre. El fue enviado por nuestro padre creador Dios, fue engendrado y no creado de la misma naturaleza que el padre. Es Jesús hombre, ser humano y como tal igual a todos los hombres menos en el pecado, pues el siendo libre de pecado, pago los nuestros, con su sacrificio, limpio, puro, sin mancha, desde donde sale el sol hasta el ocaso. Ofreció su vida por nosotros, para morir en una muerte ignominiosa de cruz. Dios padre lo exaltó y le otorgó el nombre que está por encima de cualquier hombre. De esta manera toda rodilla se doblará ante el, sin importar el lugar en el cual el otro ser se encuentre. Bien sea en el cielo, ora en la en la tierra, ora en los abismos. Absolutamente ningún ser puede permanecer erguido frente a su presencia, su rodilla deberá doblarse en señal de adoración, de subordinación y de respeto ante su poder. Jesús es señor y el hace la voluntad del padre, y su voluntad es la del padre mismo. En el está el principio y el final de todos los tiempos, de todas las cosas, de todas las situaciones. Adoremos a Jesús, demos vítores a su presencia, alegrémonos con el y en el. El nos conduce hacia la vida eterna, él es la fuente de agua viva. Con el y en el a nada nos separará del amor de Dios. Gracias Jesús, bendito y alabado sea tu nombre. Quédate Jesús por siempre con nosotros. Animo, gozo, alegría...



ETIQUETAS: DOBLAR LA CERVIZ, DOBLAR LA CABEZA, SEÑORÍO, REY,


N O T A D E L A U T O R
AMIGOS Y AMIGAS, esta oración con comentario incluido, forma parte de una larga lista de ellas y que movido por el Espíritu Santo, ofrendaba al Señor de Lunes a Viernes a las siete de la mañana, en un programa radial de opinión, en el que participaba en compañía de una periodista, en el cual mi persona le dedicaba tres minutos o más (dependiendo de la Producción y/o de Máster) a orar y analizar esa oración aplicándola a la cotidianidad de nuestra vida, de nuestros actos, de nuestras, alegrías, tristezas, éxitos, fracasos, tragedias, tribulaciones, bonanza, prosperidad, bienestar, etc. Todo con la intención de establecer como verdad aquella según la cual Dios siempre está con nosotros, que todo lo que nos ocurre es para bien, que existe un plan o proyecto de salvación para cada uno de nosotros diseñado por el mismísimo Dios, cuyo cumplimiento, decisión y elección depende de ti. Así que -parafraseando la escritura bíblica- “DIOS NOS HIZO SIN NUESTRO CONSENTIMIENTO, PERO NO NOS SALVARÁ SIN QUE LE OFREZCAMOS ESE CONSENTIMIENTO”. ES DECIR, NUESTRO PERMISO Y AUTORIZACIÓN. El Señor es un caballero, y está siempre a las puertas de nuestro corazón, para que le abramos y pueda entrar para guiar nuestra vida y ofrecernos su santidad, gozo, alegría, discernimiento, sabiduría, y sus infinitos dones espirituales y materiales. Esa estación radioeléctrica está situada -todavía está al aire- en la ciudad de Maracaibo, Estado Zulia, República Bolivariana de Venezuela.